Cómo ajustar tu estilo de juego online al póker presencial
El mundo de las nuevas tecnologías ha otorgado posibilidades casi inimaginables en diversos sectores profesionales y de ocio. Un claro ejemplo de ello es el relativo al apasionante mundo de la F1. Existen personas que disputan la liga virtual de Fórmula 1, donde cuentan con el respaldo de las escuderías oficiales y compiten en carreras con reglas, circuitos y demás parámetros similares a los que tienen que enfrentarse Lewis Hamilton o Max Verstappen. Eso sí, tras una pantalla y desde la comodidad de su casa.
Esto invita a preguntarnos si estos pilotos virtuales podrían conducir un bólido real de la misma manera. Y la verdad es que el cambio sería tan dramático que hasta podría llegar a poner en riesgo su integridad física. Este ejemplo podría trasladarse al sector del póker, donde muchos usuarios que se desenvuelven de forma espléndida jugando en su página de póker online favorita forma online, podrían acabar demostrando un nivel de juego mucho más bajo jugando de manera presencial.
Por eso, en esta ocasión hemos elaborado un informe con los cambios más estrictos y los pormenores a tener en cuenta a la hora de dar el salto del póker online al póker presencial. Este cambio podría parecer común para los usuarios más experimentados, pero para las nuevas generaciones formadas con un entorno de virtualidad permanente, puede ser un cambio difícil de afrontar. El mismo juego y las mismas reglas, pero con unas circunstancias capaces de cambiarlo todo.
Ya hablamos hace algún tiempo de cómo dar el salto del póker presencial al póker online. En esta ocasión, vamos a hacerlo a la inversa: te mostraremos los aspectos que debes tener en cuenta para ajustar un estilo de juego online al póker presencial.
Dar la cara: prepararse para el primer gran desafío
Hay una diferencia muy clara entre el jugador que desarrolló toda su carrera en salas de póker online y el que conoce el mundo del póker presencial: la forma en la que se analiza a los rivales.
Los primeros solamente tienen la posibilidad de leer la manera de actuar de sus contrincantes a través de sus resoluciones, pero no hay nada más imprescindible para un jugador presencial que intuir la mano de su rival sin haberle visto las cartas. Esto se consigue a través de la lectura de gestos, patrones conductuales y distintas cuestiones que se ganan con horas de juego presencial.
Por eso, los jugadores que deciden dar el salto al póker presencial deben aprender a controlar de la mejor manera posible su lenguaje corporal. De lo contrario, quedarán expuestos frente a una jauría de cazadores hambrientos que irán por él en el momento en el que detecten una debilidad.
Para evitar que esto suceda es fundamental contar con un alto nivel de estabilidad emocional. Un comportamiento acorde al contexto en el que se desarrolla el juego y procurar mostrar “cara de póker” a lo largo de todo el juego, independientemente de las cartas que se tenga o la situación de juego, es clave.
Enfocarse en un solo juego
Los jugadores modernos han tenido la oportunidad de acceder a todas las maravillas que ofrece el mundo de las nuevas salas de póker por Internet. Una de ellas es la de poder jugar multipartida. Es decir, de jugar en más de una mesa el mismo tiempo.
Esta forma de afrontar el juego tiene muchas ventajas. En primer lugar, esto permite que los tiempos de espera sean mucho menores, puesto que, si no se está actuando en una mesa, se está actuado en otra. Igualmente, permite implementar estrategias de juego con mucha mayor rapidez, acelerando el proceso de aprendizaje del jugador.
Sin embargo, el póquer presencial suele ser mucho más pausado generalmente. Los jugadores se toman su tiempo para tomar decisiones, analizar las acciones de los oponentes e incluso analizarlos visualmente.
Por lo tanto, para poder competir de un modo más adecuado en el póker presencial, el jugador deberá aprender a ser mucho más paciente y focalizar toda su atención en una única mesa, olvidando la clásica “hiperactividad” del póker en línea.
Adaptarse a un ritmo de juego más pausado
Muy relacionado con lo anterior es la velocidad a la que se juegan las manos en el póker online. Esto es básicamente por el límite de tiempo con el que cuenta cada jugador para realizar un movimiento. Por eso, para los jugadores que únicamente han jugado en línea, la versión en vivo parecerá algo así como una modalidad «slow motion» del póker. En cualquier caso, a cualquier jugador que quiera comenzar a jugar al póker presencial no le quedará más remedio que adaptarse a un ritmo de juego más lento y pausado.
La paciencia no solamente deberá ejercitarse durante la partida, sino también antes de sentarse en la mesa. Actualmente, jugar en línea implica esperar apenas unos segundos a que la página se abra o la app de póker comience a funcionar. Casi de forma instantánea el jugador estará jugando.
Lo que sucede en un establecimiento de póker físico es completamente distinto. De hecho, para comenzar a jugar tendrás que desplazarte al local, comprar las fichas, esperar a que haya un asiento libre en una mesa, acomodarte en tu nuevo asiento y adecuarte al ritmo del resto de los jugadores. Una visita al pasado, donde el tiempo actúa con mucha más tranquilidad.
Incremento en el gasto
Jugar al póker online con dinero real es barato. Tanto es así que es la modalidad que más tipos de jugadores acoge, independientemente de la cantidad de dinero que estén dispuestos a invertir. Esto no ocurre cuando jugamos a la variante presencial, donde el valor de la apuesta y las ciegas es más elevado. Esto tiene todo el sentido si tenemos en cuenta los gastos que implican operar un establecimiento físico y que el número de mesas es reducido. Los costos de gestión son mucho más altos y, en su defecto, también lo son las mesas.
A esto también se le sumará otros gastos adicionales. A diferencia de jugar al póker móvil, que puede hacerse desde cualquier parte, jugar al póquer presencial implica trasladarse a un espacio físico. Cada jugador deberá, por lo tanto, trasladarse hasta el casino o la sala de juego a la que decida que va a jugar. Esto requerirá una inversión en gasolina para su coche o para pagar el ticket del bus, comprar algún refrigerio entre partidas y otros gastos derivados que podría surgir y que siempre habría que tener en cuenta.
Aquí es donde empieza a ponerse en juego el sentido de la responsabilidad. Es de gran importancia tomar consciencia de lo que destinaremos a jugar al póker, que no debe ser más que una parte del dinero que hemos reservado exclusivamente para actividades relacionadas con el ocio y el tiempo libre.
A partir de ahí podremos comenzar a forjar una base que nos irá dando cada vez más respaldo para ir creciendo en esta modalidad e ir evolucionando para jugar en mesas cada vez más competitivas. Esto, a su vez, te permitirá llevar adelante esta actividad sin poner en riesgo tu economía.
Conclusión: aprender a lidiar con cambios trascendentales
Las transiciones nunca son fáciles. Un jugador de póker acostumbrado a jugar por Internet podría estar convencido de que se sentirá igual de cómodo jugando en una mesa presencial. Sin embargo, la realidad es que se encontrará con una situación completamente desconocida y que no ha vivido nunca antes. El entorno siempre hace al jugador, y en esta ocasión no será diferente.
Por eso, es importante que tengas muy en cuenta todos los aspectos que hemos descrito en este artículo. Los tiempos no serán los mismos, el hecho de saber lidiar con nuestras expresiones se convertirá en algo verdaderamente crucial, manejar los vínculos también lo será y el incremento en el gasto será la prueba definitiva que hemos dado un paso adelante en nuestro juego. Todo esto afectará, de alguna u otra manera, nuestro desempeño en esta modalidad.
Si bien el póker presencial no es para todos, vale la pena probarlo. Sentarse en una mesa con otros jugadores y probarnos a nosotros mismos será una experiencia que seguro no olvidarás. Algo que te hará crecer como jugador, más allá del resultado que consigas en esta nueva y apasionante aventura.
Juan es uno de nuestros redactores principales de Póker de nuestra página en español para usuarios tanto de España como de Latinoamérica. De la misma manera, colabora con nuestra web en inglés, redactando diferentes noticias relacionadas con el sector del póker para lectores de Estados Unidos, Reino Unido, Canadá o Australia.